Cuando empezamos una relación todos tenemos las mejores intenciones del mundo y un profundo deseo de vivir una bonita historia de amor. Pero, por desgracia, algunas relaciones siguen un camino completamente distinto y llegamos a una gran pregunta: ¿cómo salir de una relación que te hace daño?
A menudo, lo que pensábamos que era un amor profundo, se convierte en una verdadera dependencia emocional. Y aunque suframos todo tipo de abusos, no podemos salir de una relación tóxica.
Acabamos creando excusas para suavizar lo que en el fondo sabemos que no nos hace bien y no tenemos fuerzas para actuar, nos engañamos pensando que los conflictos se resolverán y viviremos un tiempo mejo
Cuando el Amor se Convierte en Dependencia Emocional
Por lo general, las relaciones tóxicas comienzan de forma sutil. La pareja comete una agresión verbal y luego muestra arrepentimiento, justificándolo con problemas externos a la relación que le están poniendo nervioso.
Aceptamos sus excusas y creemos que fue una situación momentánea. Pero la escalada de violencia no hace más que aumentar, empezamos a ser ridiculizados por los demás y a menudo agredidos físicamente.
Perdemos completamente nuestra naturalidad por miedo a hacer algo que pueda desagradar a nuestra pareja. E incluso cuando sabemos en el fondo de nuestro corazón cómo esta relación nos está causando daño, no podemos imaginar nuestra vida sin esta persona. Estamos tan descalificados que acabamos creyendo que no tenemos ningún valor y que no somos nada solos.
En esta fase podemos decir que se configura la dependencia emocional. Creemos firmemente que no es posible vivir sin ser dominados por nuestra pareja, aunque la vida con ella sea un auténtico infierno.
Como Salir de una Relación Tóxica
El primer paso para salir de una situación perjudicial es reconocer que te encuentras en una situación de dependencia emocional y que necesitas actuar de la forma más racional posible para salir de ella.
Pide ayuda a familiares y amigos e incluso ayuda profesional si es necesario. Y toma medidas prácticas y planificadas para dejar esa relación. Busca un lugar donde quedarte, organízate económicamente y ten organizado lo imprescindible para tu vida, como documentos, tarjetas.
Si es necesario, no dudes en pedir ayuda a las autoridades. Muchas mujeres han perdido la vida porque no creían que sus parejas fueran capaces de hacerlo, incluso después de muchas amenazas.
Cuídate
Una vez garantizada tu seguridad, evita en la medida de lo posible cualquier contacto con esta persona. Afronta la dependencia emocional como una drogadicción, evita lo que es malo para ti.
Busca terapias, aficiones y actividades que te hagan bien y con las que puedas recuperar poco a poco la alegría de vivir. Redescubre tu valor, cuídate y cúrate. Evita buscar inmediatamente una nueva relación. Date cuenta de que eres plenamente capaz de ser feliz sin necesidad de tener a alguien a tu lado. Una pareja debe ser un complemento, una fuente de alegría y no una salvación.