Cuando hablamos de atraer el amor verdadero, con las cualidades que deseamos en una relación, tenemos que tener dos cosas muy claras en mente. NUNCA debemos centrar nuestra atención en una persona concreta, porque no sabemos si la persona es realmente lo que imaginamos. Tampoco sabemos si a persona tiene las mismas intenciones que nosotros, todos tenemos libre albedrío. Pero, ¿cómo utilizamos la Ley de la Atracción para atraer el amor verdadero?
Tenemos que empezar a dibujar en nuestra mente el tipo de personas que queremos atraer.Piensa en lo que quieres, una persona cariñosa, feliz y fiel. Una persona libre y disponible para una relación contigo. Una persona con estabilidad económica.
En definitiva, con las características que tú quieras, este es un ejercicio muy personal. Pero es fundamental que lo hagas varias veces.
¿Por qué no debemos concentrar nuestra energía en una persona concreta?
Cuando nos fijamos en una persona concreta no estamos abiertos a que el Universo nos traiga la energía que realmente corresponde a nuestros deseos, al contrario, nos convertimos en prisioneros de una ilusión.
Aquí radica la dificultad de la mayoría de las personas para atraer la energía del amor a sus vidas. Porque, bajo la justificación de que aman a una determinada persona, se obsesionan. Y esta obsesión no tiene nada que ver con el verdadero amor.
Atraer el Verdadero Amor a tu Vida
Los que aman de verdad, se aman primero a sí mismos y luego dejan a la otra persona la libertad de elegir su destino, aunque nosotros no estemos incluidos en ese futuro.
Quien ama a otra persona a cualquier precio no siente realmente amor por el otro, sino que quiere satisfacer su propio ego demostrando que es capaz de conseguir a quien quiere.
Mira dentro de Ti
El principio fundamental de la ley de la atracción nos dice que para atraer algo, necesitamos vibrar en la frecuencia de lo que queremos atraer. Y ahí está la gran clave transformadora que nos permitirá atraer a alguien con las características que deseamos.
Tenemos que empezar a visualizar en nosotros lo que estamos dispuestos a compartir con alguien. Nuestro foco ya no debe estar en la otra persona, sino en nuestros puntos positivos que podemos y sobre todo queremos ofrecer a la otra persona.
Dona lo mejor de ti
El enfoque debería ser: quiero compartir mi alegría con alguien porque soy una persona feliz, o quiero cuidar a alguien porque soy una persona cariñosa.
Tu enfoque se convierte en dar y no en recibir. Y la magia sucede cuando encuentras a alguien dispuesto a recibir lo que tú tienes para dar.
¿Y cómo te responde el Universo? ¡Dándote más de lo que vibras!
Al prestar atención a lo que tienes que ofrecer a los demás, también puedes eliminar un gran error que la gente tiende a cometer cuando busca el amor verdadero, que es la idealización.
La atención se desplaza hacia tus cualidades, hacia el reconocimiento de los elementos presentes en tu personalidad que podrían aportar alegría y felicidad a quienes tuvieran una relación amorosa contigo.
Eres una criatura divina con cualidades divinas. Céntrate en lo que hay de bueno en ti, deja que ese lado fluya y se expanda.
El Universo a Tu Favor
Cuando seas capaz de emanar este sentimiento y energía hacia el Universo, sólo será cuestión de tiempo que el Universo te una a una persona que quiera recibir todo lo que tienes que ofrecer.
Puedes estar seguro de que tu amor llegará. Porque ya te has colocado en el flujo universal del amor con toda tu energía para dar amor, con todo tu deseo de estar con otra persona. Y así, el Universo te traerá a alguien con la misma sintonía y el mismo deseo.
